NUNCA SE SABE
Juegos de Lengua: ritmo y razón
Isabel Escudero
En agradecimiento a Agustín García Calvo, con quien tanto jugamos…
¿QUÉ es lo que hacen esas coplas, versos, proverbios, acertijos o canciones que se me escapan a rachas al menor tropiezo? Por un lado, claro, imitan al pueblo (que, al no ser nadie, es el solo dueño de la lengua viva) en los juegos de sabias polimetrías, asonancias y otros trucos que de la poesía anónima nos han quedado.
Por otro lado, como muchas de las cosas llamadas populares no son tan limpias y del común como debían, estos versos, y otros de registros y hechuras más líricas y literarias (que de todo hay en la viña del Señor), se dedican a tomar algunos hallazgos o desengaños claros que he oído o leído de los pocos sabios…, o bien a dar cuenta de sentimientos y ocurrencias que no sé de dónde me vienen y convertirlos por juego de ritmo y razón en cosas que suenan al aire del cantar o el verso. Y, en cualquier caso, poco pueden parecerse a lo que hoy día se produce y vende como poesía, ¡qué se le va a hacer!
Por otro lado, como muchas de las cosas llamadas populares no son tan limpias y del común como debían, estos versos, y otros de registros y hechuras más líricas y literarias (que de todo hay en la viña del Señor), se dedican a tomar algunos hallazgos o desengaños claros que he oído o leído de los pocos sabios…, o bien a dar cuenta de sentimientos y ocurrencias que no sé de dónde me vienen y convertirlos por juego de ritmo y razón en cosas que suenan al aire del cantar o el verso. Y, en cualquier caso, poco pueden parecerse a lo que hoy día se produce y vende como poesía, ¡qué se le va a hacer!
A mi amigo de siempre (a quien el arte y gracia de estas coplas le deben tanto que ni se cuenta) le he oído decir tantas veces, cuando juntos nos lanzamos a recitar por esos mundos de Dios, al ir a recitar de las suyas: “las que suenen bien y os hieran, no son mías (vienen de más abajo): las torpes y malas, ésas son mías”. Hago mías sus palabras para estos versos, que, aunque aparezcan bajo mi nombre, en lo que tengan de bueno no son míos; y tanto así que, igual que la poesía anónima sólo vivía de sus variantes, no me importa nada (al revés) que, si algunos se quedan en la memoria con algo de esto, lo muden y trastuequen al repetirlo, con tal de que sea sin querer: unos lo harán con mal tino, otros con bueno, y lo que sea sonará.
Isabel Escudero
21 de Junio 2010
NUNCA SE SABE
Editorial Pre-textos.
Noviembre 2010