José Luis García Rúa. Foto José Luis Fernández
N. S. El filósofo anarquista José Luis García Rúa (Gijón, 31 de agosto de 1923) es Catedrático emérito de la Universidad de Granada y militante de la Confederación Nacional del Trabajo que asistió ayer al sepelio.
-¿Cuál fue su relación con el intelectual?
-Lo conocí en el año 1945. Nos conocimos haciendo la carrera y seguimos la amistad durante toda la vida. Fuimos casi como hermanos. De Agustín destacaría su humanidad y su amor a la luz. Su valentía para enfrentarse a la injusticia. No buscó la primera página y no pretendió nunca salir en la prensa. Además, creo que profesaba un profundísimo amor a la verdad. Una valentía desmedida que no conocía prácticamente límite pero todo ello con una gran sencillez, sin ninguna clase de ostentación ni personalismos. Era un hombre extraordinariamente inteligente, de una honestidad intelectual sin tacha, que lo que buscaba era la sencillez en la vida del pueblo no contaminado.
-Traductor, filósofo, poeta, dramaturgo? ¿Qué faceta destacaría del hombre intelectual?
-Agustín se entiende con todas sus facetas, pero personalmente destacaría su vertiente no como poeta de forma, sino poeta de gran profundidad. La poesía de Agustín hay que leer muchas veces porque cada vez que te acercas a un verso descubres algo nuevo en ella. Como pensador fue un nombre que se opuso a la filosofía formal de los prácticamente módulos eclesiales e incluso módulos universitarios. Conocí directamente enfrentamientos que tuvo, no porque les buscaran, sino porque le interpelaran filósofos de mucho renombre y de gran valía en España y realmente era un hombre con tal capacidad de argumentación que dejaba sin poder de contestación al contrario, lo que evidencia su gran inteligencia.
En La Opinión de Zamora, 3 -11-2012
